Frondosa estrategia para el fomento de la lectura
Friday 17 October 2014 - 00:00 HS

Alguien tuvo un sueño surrealista, el sueño se hizo realidad. Alguien soñó un árbol cuyo fruto era leible; especie frondosa que en vez de convertirse en papel, empleaba la clorofila para producir libros con una prodigiosa fotosíntesis traducida en letras.
Desde su portentosa nervadura, desde el envés y el revés el follaje se convertía en palabra escrita y el sueño se volvió realidad, pues sus ahora ramas plásticas se prolongaban hasta terminar en libros.
Entonces el árbol habló:
Porque ascendido con el sabor a polvo
Con el oro y con el plomo
Con estas raíces incrustadas en la tierra.
Porque se viaja en corcel negro
Por mis verdes venas
Del tronco a tu mirada.
Porque de esta ceniza está hecho mi cuerpo
Y el tuyo
Y a ambos nos mueve el viento.
Porque vienes a leer el fruto
A trepar mi cuerpo
A regocijarte con mi sombra.
Porque en cada ramificación te llevo
Para tenderme bajo el sol,
Saber mi amplia sombra sobre ti,
Y el texto fruto de mi ser
Pronunciado por tu boca.
Alguien soñó un árbol que daba libros y la Novena Feria y Bazar de libros lo hizo realidad, pues para hacer más atractivo el fomento a la lectura del Tabachín situado frente a biblioteca colgaron algunos ejemplares sobre Historia y Literatura.